miércoles, 18 de mayo de 2016

Make it rain,

He tardado más de lo necesario en darme cuenta de que he estado corriendo en círculos sin cesar. 
Muchas veces me he fatigado y había pensado en tirar la toalla, pero supongo que como cualquier atleta no sé abandonar cuando crees ver la salida tan cerca.

Tanto corrí detrás tuyo que me perdí por el camino, dejé de ser quien era, ese carácter. Me convertí en polvo mientras seguía los pedacitos de pan que creía que me llevarían hacia ti, pero me equivocaba.

Supongo que hoy es el día del arrepentimiento, de todo el tiempo que he invertido para al final chocarme contra una pared. Quizá debería de gritarte y de decirte que no me mereces, que ahí te quedas y que no vuelvas a hablarme, pero estoy tan cansada y tan enfadada que no me merece nada la pena, prefiero irme con el rabo entre las piernas y no hacer ruido. Supongo que lo más chocante es darse cuenta de que te has enamorado de una persona que ya no existirá jamás, sólo creerás que el recipiente contiene la misma esencia, pero te equivocarás.

Se acabó la autocompasión y el autoengaño, se acabó.

Hoy retomo el aliento, poco a poco no es lo que quiero, cogeré mis bártulos y me perderé un rato por la ciudad para poder encontrarme. Me iré, y descubriré todo aquello que no me haga falta y lo que sí necesite para poder cada día irme a dormir sin una sensación que se mantiene constantemente en una incógnita.

Dejaré con el tiempo de pensar en ti, es lo que tardará en desaparecer la roca que hoy se ha acoplado en mi cuerpo. Me olvidaré de mí, de ti.

Ahora todo es sobre mí y nada más que sobre mí.